Hasta el fin del mundo, siempre tuya.

"Muchos creyeron que ése día iba a definir un cambio en la historia, algo único e irrepetible. Yo jamás les hice caso, pero tenía el presentimiento de una cosa mala. Estubieron años anunciando ése día y los meses antes no qurrás imaginar.
Pasaron los días y seguía siendo indiferentea lo que me iban aclarando. Que me cuide, que aproveche lo que puedo hacer, que haga tantas cosas! Claro que yo no hacía caso a nadie, me daba igual que ése día venga o no. Hasta que llegó, fue un lunes en el que caí que tenía que hacer lo que siempre quise hacer, lo deseaba. Pensé mil veces lo que podría hacer hasta que llegue a una conclusión. Iría a la casa de mi tía en la capital de la provincia y de ahí haría lo que prentendía hacer.
Mis padres me dieron permiso, con la condición de que ellos vendrían con migo. Querían pasar ése último miércoles con migo y en familia. Acepté su propuesta y nos fuimos inmediatamente esa mañana hacia nuestro destino.
Cuando llegué solo quería hacer una cosa, y lo hice. Llamé al chico que amaba y que vivía cerca de allí y le pedí su dirección en la cual vivía. Le pregunté si iba a hacer algo, ya que todo el mundo tenía planeado sus horas, y me respondió que no. Así que sin dudarlo salí a la calle y esperé practicamente en vano a que llegara un taxi o alguien que se ofreciera a llevarme. Cuando ya estaba hechándome hacia atrás para volver a casa, paró un taxi que me llevaría. Le pregunté al señor que conducía por qué estaba trabajando y no haciendo otra cosa, era muy raro ver autos en la calle, y me respondió que el no tenía nada para hacer, que lo había perdido todo y que trabajaría para ayudar a quien necesite su ayuda para enmendar sus errores. No le quise preguntar más y me quedé callada por un instante hasta que me preguntó hacia donde iba, y ahí caí rapidamente y le dije Santa Marina ... ; nunca me pareció haber viajado tan rápido, o quizás fue solo mi imaginación. Estaba casi dormitando hasta que me dijo "llegamos" y por esa palabra fue que mi cuerpo comenzó a temblar y mi mente a hacerse preguntas: ¿Qué le diré? ¿Estaré linda? ¿Querrá verme, o sólo lo dijo para quedar bien? Entre otras tantas.
Bajé demsiado rápido que me caí y doblé mi tobillo, supongo que el taxista no lo notó porque lo dismulé bastante bien, o eso creo. Le dí mil gracias al hombre y caminé hacia la puerta que estaba a metros del auto. Sin pensarlo toqué el timbre de la casa y tube la sensación de descomponerme pero eran solo los nervios. Esperé unos segundos que no llegaron al minuto y se comenzó a abrir la puerta. Era él, desarreglado, pero él.
Nos miramos 1 o 2 minutos y no pude resistirme más, caí en sus brazos como si estubiera muriendo. Me abrazó como nunca me habían abrazado, cerré los ojos y disfruté el momento. Estubimos un largo tiempo así, hasta que me separó suavemente de él y me miró a los ojos firmemente, se fue acercando como queriéndome besar pero lo detuve. Y no me arrepiento! Quería guardar sus besos hasta el momento indicado. Me tomó de la mano y me llevó hacia dentro. Estaba su familia, ésa que ví hace bastante y me había caído mas que bien. Me saludaron alegremente, y jamás me sentí tan... en casa. Seguimos nuestro camino y me llevó a su habitación, estaba desordenada pero eso era lo que menos importaba. Nos sentamos en su cama y quiso besarme de vuelta, pero volví a evitarlo. Todavía no logro entender como hice para resistirme de esa manera a sus besos tan hermosos. Se rindió a querer tocar mis labios y comenzó a sacar temas. Hablamos, reímos, jugamos, hasta nos pusimos tristes. Cada vez que nos deteníamos nos mirábamos diciendo esas cosas que nos moríamos por decirnos.
Llegó la noche y le conté un secreto. Cito: No me importa lo que pueda pasar hoy, mañana o cuando sea, pero quiero estar con vos. Y quiero guardar esos besos que rechazé para el momento en que más los necesite. Ah, y si tenías alguna duda, te amo.- Jamas pensé que podría decirle eso en su mismísimo rostro, pero lo hice y me sentía maravillosa. Me dijo tantas cosas como respuesta que si antes estaba enamorada, en ese momento no existía adjetivo que me indentificara. Se hizo tarde y dijo que siempre quiso dormir (sin hacer nada atrevido, aclaró) en una cama con migo... Como la fecha lo impedía que lo hagamos otro día, me sentí debilitada por su petición y me acosté junto a él. Nos quedamos los dos enfretados, acariciándonos el pelo y sin decir nada hasta quedarnos dormidos.
Al día siguiente nos despertamos demasiado tarde, y repetimos lo mismo que hicimos el día anterior, me sacó de la casa a conocer el barrio, me presentó a sus amigos y pasé un tiempo con su familia; hasta me olvidé que yo tenía una. Llegó la noche de pronto y sin decirme nada me pidió que vaya a su cuarto a buscar frasadas y un par de almohadas si quería, que él iba a ir a un lado. Fui a buscar lo que me pidió y cuando volví estaba esperándome con una cajita en una puerta, la cual yo no sabía que había detrás. Me tomó de la mano, al igual que cuando llegué a su casa y me llevó hacia dentro, abrió la puerta y había una escalera que daba a una terraza. Subimos, nos acomodamos y vimos como la noche tomaba un color muy extraño. Me cubrió con una manta y me abrazó, al hacerlo me dijo: no sé porque viniste, pero agradezco que sea así. Yo siempre te amé, y vos tenés algo que me es imposible de olvidar. No sos como las demás, siento que sos mucho más de lo que busco. Y no me importa que pase mañana ni que pase hoy, solamente quiero que me des esos besos que me vengo aguantando desde ayer; porque si no choco mis labios con los tuyos voy a estallar. Inmediatamente me dí cuenta que ése era el momento en que necesitaba urgente uno de sus besos. Y fué en ese instante que me besó con tanta pasión que enloquecí.
Después de tantos besos me pidió que hiciera algo, que escribiera todo esto que nos estaba pasando. Porque sabía que algún día iba a ser una buena historia para contar. Por eso, hoy 11 de diciembre de 2012, a las 23:58, le cuento escribiendo a quien lea este simple papel todo lo que amo a esta persona que está a mi lado. Y que no importa que llegara a pasar dentro de unos minutos, nada va a cambiar mis sentimientos porque si esta historia termina va a terminar con nosotros dos jun..."