Día a día aprendiendo a ser

¿Por qué? Tantos por qué.
Ya no logro entender nada, ni siquiera el idioma de mi corazón, que me dice tantas cosas y ni la mitad logro comprender. Es complicado, siempre dicen lo mismo. Pero no es cierto, no es complicado... Yo soy complicada, esta locura me hace así. Uno siempre busca culpables fuera de sí mismo, para no aceptar la responsabilidad; pero yo no hago eso, soy consciente de que soy la culpable de toda esta situación de mierda que yo misma provoco, pero algo me lleva a querer que otro fuera el responsable. Y ése, para mí, siempre es él.
Uno siempre dice: lo voy a olvidar, ya fue, no voy a caer, y otra serie de mentiras. Sé que no es imposible, pero ¿cuál es la fórmula? hace más de un año que ni siquiera lo veo, y aún así sigo esperando ése día en que pueda verlo de nuevo y dejar que todo lo que esperó tanto tiempo fluya sin mi consentimiento. 
Sin embargo, ya no puedo más. Me gustaría desaparecer de su vida, no buscarlo ni tratar de que me busque, que de a poco me vaya despejando de todo esto que me pasa, y no es que quiera, pero a veces lo mejor no es lo que se quiere, ¿no?. Y no es que de la nada estoy cansada, esto viene desde antes, semanas, meses, mucho tiempo. Y lo que me moviliza es que mi miedo es perderlo, pero... ya lo perdí. Es más, ni siquiera se si lo tuve, quizás yo era su segunda opción y no la primera como siempre pensé. 
Uno trata de parecer fuerte, de decir "todo está bien", de encerrar ese llanto para que no salga a la luz. Pero ya no puedo, hasta mi mamá me dice que duermo mal de noche, que me quejo, que lloro, que tantas cosas. Supongo que hay cosas que hay que dejar ir, y dejar ser. Ahora, si alguien sabe cómo hacerlo bien, por favor, que me lo diga.  

{Voy pensando en que no hace ni un año y las cosas ya no son igual, las disculpas no cuesta aceptarlas, me cuesta saber perdonar.Y vuelvo a despertar, cansado de estar tan cansado de ser me digo: “No hay mitad que sea tan mala como la que tenés”.Y olvido que traigo conmigo canciones y amigos; tu alma es ahora mi estrella, el dolor ya no hace mal. Mirando estoy, a veces me toca el silencio total, colgado de la hoja más alta del árbol que sé imaginar, porque hay cosas que sangran por dentro y nadie las puede notar y me acuesto en la cama que un día la ropa te supe robar. Si percibo en la luna esa luz eterna que reza tu nombre y convida el sabor, quiero amanecer que mañana no soy si no tuve tu ayer...}